Científicos desarrollaron una nueva terapia celular para el cáncer de mama triple negativo, uno de los más agresivos y difíciles de tratar. En este estudio usaron células inmunitarias creadas a partir de sangre del cordón umbilical y las modificaron para reconocer y atacar las células tumorales.
En estudios con animales, estas “células inteligentes” eliminaron los tumores y resultaron seguras. Aunque aún falta probarlo en humanos, el avance promete una futura terapia universal, más accesible y eficaz.
El cáncer de mama triple negativo, no responde bien a los tratamientos más comunes, como las terapias hormonales o dirigidas, y suele tener pocas opciones efectivas cuando se vuelve resistente o se extiende a otras partes del cuerpo. Por ello los científicos están probando una terapia innovadora que usa células del sistema inmunitario modificadas en el laboratorio para reconocer y destruir las células del tumor.
Los investigadores crearon un tipo especial de células inmunitarias “entrenadas” llamadas CAR-NKT.
-
NKT son células que funcionan como una mezcla entre dos tipos de defensores del cuerpo: las células T (que reconocen amenazas específicas) y las células NK (que atacan rápidamente lo que parece peligroso).
-
Estas células fueron fabricadas a partir de células madre de la sangre del cordón umbilical. Esto permite crear un tratamiento “listo para usar”, que no necesita personalizarse para cada persona, lo que podría hacerlo más rápido y más barato.
-
A las células NKT les añadieron un “sensor” especial (un receptor CAR) para que puedan reconocer una proteína llamada mesotelina, que está presente en muchas células de este tipo de cáncer pero no en las sanas.
-
También las programaron para producir una sustancia llamada IL-15, que les ayuda a sobrevivir y mantenerse activas por más tiempo.
Resultados del estudio con células de cáncer en el laboratorio y en ratones con tumores humanos:
- Las células CAR-NKT atacaron eficazmente las células del cáncer de mama triple negativo.
- No solo destruyeron las células cancerosas directamente, sino que también eliminaron otras células “protectores del tumor” que suelen bloquear la respuesta del sistema inmunitario.
- Lograron reducir el crecimiento de los tumores y aumentar la supervivencia de los animales.
- No causaron efectos secundarios graves ni signos de rechazo.
- Se mantuvieron activas durante más tiempo, sin agotarse, algo que suele ser un problema en otros tratamientos de este tipo
Aún queda camino por avanzar en este estudio, pero sí es un avance importante hacia una nueva generación de tratamientos más inteligentes y personalizados contra este tipo de cáncer.
VER PUBLICACIÓN CIENTÍFICA https://jhoonline.biomedcentral.com/articles/10.1186/s13045-025-01736-9