Uno de los avances que más expectativas ha generado en la medicina está basado en la investigación con células madre, y en particular, las mesenquimales que proceden de médula ósea, tejido adiposo, los músculos esqueléticos, el tejido de cordón umbilical… ya que está comprobada su gran potencial en medicina regenerativa por su propiedades anti-inflamatorios, anti-estrés oxidativo o anti microbianos.

Las células madre mesenquimales secretan un conjunto de sustancias que contienen proteínas solubles denominadas exosomas y juegan un papel fundamental en la comunicación intercelular. Gracias a ellas, las células madre mesenquimales “dan instrucciones” al resto de las células, que “obedecen” regenerando y reparando su funcionalidad normal.

Cultivando las células madre en un medio adecuado se recogen las sustancias que liberan obteniéndose el denominado “secretoma”. Los ensayos preclínicos demuestran que las sustancias contenidas en el secretoma reproducen los efectos terapéuticos de las células madre, sin necesidad de tener que implantar células vivas en el organismo de los pacientes, lo que abre la puerta a toda una nueva era de medicamentos.

El conocimiento del mecanismo de acción de las células madre mesenquimales ha demostrado que el tejido del que provienen influye en sus propiedades terapéuticas. Las células madre mesenquimales del cérvix uterino (hUCESC, “human uterine cervical stem cells”), atesoran una serie de propiedades excepcionales en comparación con las provenientes de otros tejidos.

A partir de ese hallazgo de Gistem Research, una empresa biotecnológica española, y el desarrollo tecnológico realizado por su equipo científico, ha logrado dimensionar el impacto del descubrimiento, orientándolo hacia el interés terapéutico innovador del secretoma obtenido de esas células cultivadas en el laboratorio. Hasta el momento la compañía ha centrado sus investigaciones principalmente en el tratamiento y recuperación de los daños provocados por dos graves enfermedades y que no tienen tratamientos realmente eficaces: el Síndrome del Ojo Seco y la Enfermedad Inflamatoria Intestinal (que incluye la enfermedad de Crohn, incluyendo las fístulas asociadas con ese proceso, y la Colitis Ulcerosa).

El secretoma de las hUCESC  representa un producto biológico, de alto valor científico-tecnológico, que tiene la genuina propiedad de contrarrestar simultáneamente los diversos mecanismos fiisiopatológicos de las enfermedades complejas. Por ello, su producción industrial se ha convertido en un objetivo estratégico de Gistem Research que permita convertir el fruto de la investigación en fármacos que lleguen a multitud de pacientes.

Las agencias reguladoras, tanto española (AEMPS) como europea (EMA), han clarificado la regulación aplicable, clasificando el secretoma de células madre mesenquimales como medicamento biológico. Se suman con ello al desarrollo de esta tecnología para hacer llegar la innovación terapéutica a la clínica.

FUENTE okdiario.com/salud/farmacos-partir-celulas-madre-nueva-era-medicina-11415399

 

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