Cuando los bebés aún en el útero materno, sufren un derrame cerebral, el daño potencial puede durar toda la vida, por lo que el Instituto Hudson de Investigación Médica en Australia ha comenzado un ensayo clínico que tiene como objetivo cambiar eso utilizando células madre que se encuentran en la sangre del cordón umbilical del propio bebé.

“Cada año en Australia, alrededor de 600 bebés sufren un derrame cerebral en el útero y los efectos pueden ser devastadores, incluida la parálisis cerebral y una variedad de otras afecciones del desarrollo neurológico”.

El director de la Plataforma de Terapias Celulares del Instituto Hudson, el Dr. Gordon McPhee, dijo que el objetivo del ensayo es demostrar que este tipo de tratamiento es seguro, práctico y posible. La Plataforma de Terapias Celulares del Instituto Hudson permite a los médicos procesar productos sanguíneos en el mismo lugar por primera vez, evitando la necesidad de un transporte costoso y lento al banco de cordón de Melbourne. “En este ensayo STELLAR, las células madre de la sangre del cordón umbilical del bebé se recolectan al nacer y se reintroducen en el torrente sanguíneo en las primeras semanas de vida, y ese tipo de tratamiento solo es posible gracias a la tecnología a la que ahora tenemos acceso en el Instituto Hudson”.

“Estas células madre tienen propiedades neuroprotectoras, neuroregenerativas y antiinflamatorias, y esperamos demostrar que pueden revertir parte del daño cerebral causado antes del nacimiento“. “Ahora que el primer bebé ha formado parte de este ensayo, el objetivo es poder ofrecer el tratamiento a más padres de recién nacidos vulnerables”, dijo. “Una vez que hayamos demostrado que este tipo de terapia es práctica y segura, pasaremos a un ensayo más amplio para evaluar los beneficios a largo plazo“. “El objetivo final es que estos niños tengan las mejores posibilidades posibles de desarrollar todo su potencial”.

Este es un estudio de seguridad y viabilidad y contribuirá al avance de esta área de la medicina regenerativa de lesiones cerebrales infantiles. La investigación proteínica ha proporcionado evidencia de que la sangre del cordón umbilical es neuroprotectora, neuroregeneradora, inmunomoduladora y tiene propiedades antiinflamatorias. Esto significa que estas células tienen el potencial de revertir o mitigar parte del daño cerebral causado por una lesión prenatal (accidente cerebrovascular).

• +INFO de ESTE ENSAYO CLÍNICO: www.hudson.org.au/stellar-trial/
• VER LA HISTORIA DE CHASE, EL BEBÉ QUE PARTICIPÓ EN ESTE ESTUDIO: www.youtube.com/watch?v=5DRLnlPnYGM